La economía argentina atraviesa una de sus peores crisis, con un nivel de contracción comparable al registrado en plena pandemia de COVID-19. Esta situación afecta a todos los sectores económicos y ha desencadenado consecuencias devastadoras para el empleo, que amenaza con empeorar en los meses venideros. El consumo masivo, de hecho, se derrumbó un 15 % en julio, de acuerdo a un informe de la consultora Scentia, reflejo de la caída de ingresos y de las malas expectativas.
En el primer trimestre del año, el nivel de desocupación fue del 7,7% según el INDEC, lo que implica un aumento de 0,8 puntos porcentuales con respecto a igual período de 2023 (6,9%). Consultada por ANUNM, Lara Yepes, coordinadora de la Licenciatura en Relaciones del Trabajo de la Universidad Nacional de Moreno, reflexiona: “Estos números tienen un impacto cuando se ven junto con otros datos dentro del mercado laboral. Este valor indica que de cien personas, siete de ellas están sin trabajo pero siguen buscando empleo. En el trimestre anterior esa cifra era aproximadamente cinco por cada cien. Asimismo, ese dato también refleja que el mercado laboral no está pudiendo absorber a todas las personas que están buscando trabajo”.
Por otra parte, Yepes, quien también es profesora a cargo de la asignatura Remuneraciones y Beneficios en la UNM, aclaró: “Este valor sólo representa a las personas que están cobrando un salario registrado. Además de las personas que se quedaron sin trabajo en el último trimestre, también hay que considerar a quienes ya no buscan trabajo porque no hay y están precarizados en el mercado informal”. En cuanto al resto del año, Yepes advirtió que, mientras no se logre una reactivación del empleo mediante un aumento en la capacidad productiva de las empresas, esta cifra podría seguir aumentando.
El gobierno anterior había comenzado un sendero de crecimiento del empleo a partir de agosto de 2020, logrando recuperar con creces todos los puestos que se perdieron tanto durante la pandemia como en el gobierno de Mauricio Macri. De acuerdo al Centro de Economía Política Argentina (CEPA), al finalizar el mandato del Frente de Todos se habían generado 581.000 puestos de trabajo desde el mínimo de la cuarentena (julio de 2020).
La tendencia se revirtió a partir del triunfo electoral de Javier Milei, ante un nuevo modelo de apertura, liberalización y desregulación de la economía, como ya revelaba un análisis de CEPA sobre la situación del empleo registrado privado (con datos al mes de febrero 2024). “En el mes de febrero, se perdieron 20.666 puestos de trabajo registrados en el sector privado. En el primer trimestre del gobierno la caída totaliza 62.920 empleos”, afirmaba ese centro.
En la misma línea, según el informe de mayo del Observatorio de Industriales Pymes Argentinos (IPA), en apenas seis meses de Milei el impacto en términos de la actividad, empleo y salarios, es similar a la crisis del cuarto año de Macri. La recesión libertaria llevó a que las empresas tuvieran que adelantar vacaciones, recortar turnos, suspender personal y, recientemente, iniciar un proceso de aceleración de los despidos. “La caída del empleo en los primeros tres meses de 2024 representa alrededor de 58.000 puestos de trabajo, de los cuales 11.000 son de pequeñas y medianas empresas”, estimaron desde IPA. Su informe remarcó que el empleo privado registrado lleva cuatro meses seguidos de reducción, bajando -1,3% desde noviembre del año pasado.
Como ya se mencionó, aunque cada vez más ramas de la economía se ven golpeadas por la depresión de actividad y la caída de las ventas, el rubro de la construcción fue el más afectado de todos. Desde febrero la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) se declaró en estado de alerta y asamblea permanente a nivel nacional. “En los dos últimos meses se han perdido 50.000 puestos de trabajo directos y más de 100.000 indirectos, como consecuencia de la desfinanciación y consecuente paralización de las obras públicas en ejecución”, denunció la UOCRA mediante su comunicado de prensa.
Del mismo modo, el ministro de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires Walter Correa ha expresado su preocupación respecto a los despidos en la construcción desde el corte de la obra pública de Nación y los puestos de trabajo que están en peligro. Asimismo, el Ministerio ha comenzado a recibir pedidos de procedimientos de crisis y suspensión, por el Artículo 223 bis de Ley de Contrato de Trabajo, de parte de empresas que no pueden continuar o que deben suspender personal.
“Llamativamente, la caída en los puestos de trabajo es algo mayor en las empresas grandes (de más de 200 personas, fue -0,6% intermensual) que en las pequeñas y medianas (-0,5% i.m.)”, afirmó IPA. La rápida reacción de las grandes empresas, como el ejemplo de Acindar en Villa Constitución, que por primera vez en su historia apagó los hornos y suspendió la producción afectando a 3000 operarios, anticipa un proceso similar en las PyMEs. Para IPA las expectativas empresariales son que el derrumbe de las ventas en el mercado interno se sostendrá en el tiempo y que lamentablemente, ya no se justifica mantener los niveles de producción. Por tal motivo, sin un horizonte de recuperación a la vista, también las empresas grandes necesitan reducir costos laborales.
Empleo y Estado
Con respecto a las cesantías en la Administración Pública, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) ya ha contabilizado más de 11.000 pérdidas de puestos de trabajo y ha manifestado su preocupación por una nueva ola de despidos a fin de junio, cuando finalicen 60.000 contratos de la planta transitoria. En Moreno, sufrieron desvinculaciones más de veinte trabajadores de las oficinas locales de la Anses de los barrios Cuartel V y Trujui, incluso Rosana Martínez que lleva diez años como empleada del organismo.
En Anses de Trujui se convocó una radio abierta en solidaridad a los despedidos y para reclamar la reincorporación de Rosana y sus compañeros. Raúl “El Mosca” Soria, trabajador municipal e integrante de ATE-Moreno, sostuvo en el encuentro: “Roxana trabaja hace diez años. Sin ánimos de generar controversia pero sí analizar, ¿cuántos gobiernos pasaron? Y ella seguía precarizada. Amén del enemigo en común, una de las cuestiones que tenemos que empezar a entender las y los trabajadores, es la necesidad imperiosa de exigirle a quienes gobiernan ocasionalmente que se acabe de una vez por toda la precarización”
Finalmente, el delegado recordó: “Había un acuerdo con el expresidente Alberto Fernández para que pasen a planta permanente una cantidad enorme de compañeros nacionales. Ese acuerdo se hizo con ATE, y sin embargo no ocurrió. ¿Qué sucedió? Claramente al llegar el gobierno neoliberal del señor Milei, esos compañeros y compañeras se quedaron sin trabajo. Muchos de ellos también como Rosana, con muchos años de antigüedad”.