La llegada del frío trae el encendido de estufas, cocinas, braseros y otros artefactos para calefaccionar la casa. Sin embargo, cuando esa calefacción no se realiza de forma responsable y sin ningún tipo de ventilación, las personas pueden llegar a intoxicarse con monóxido de carbono (CO). El CO se genera por la combustión incompleta del carbono tanto en la leña, como en el carbón, gas, kerosene, alcohol, gasoil y nafta, que son expulsados por vehículos, estufas u otros elementos para combatir las combatir las bajas temperaturas.
En Argentina, el Hospital Garrahan registra 40.000 casos de intoxicación por monóxido de carbono cada año y mueren aproximadamente 200 personas por este motivo. La mayoría de los casos son evitables. El monóxido de carbono es un gas con mucha toxicidad para las personas y los animales, y es imposible percibirlo porque no tiene color, olor, ni sabor. Al ingresar al organismo a través de los pulmones, compite con el oxígeno en sangre y provoca la disminución del mismo en los organismos vitales; las consecuencias pueden ser graves, principalmente para el cerebro y corazón.
El médico especialista en Neumonología Gabriel Yusti cuenta que las intoxicaciones se dan más en invierno: “En las épocas invernales hay menos ventilación de los hogares y de las viviendas, por lo cual se produce mayor acumulación de monóxido de carbono”. La intoxicación puede expresarse con distintos síntomas, dependiendo de la gravedad de la etapa. Al respecto, el especialista señala que “en cuadros leves se presentan mareos, dolores de cabeza y cansancio, que luego progresan en náuseas y vómitos”. A su vez añade: “En cuadros más graves lleva a la somnolencia, convulsiones, pérdida de conocimiento y problemas respiratorios ocasionando la muerte, dependiendo del tiempo de exposición al mismo”.
Por su parte, Ariel Barcala, comandante en Jefe del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Moreno, indica que hay recomendaciones claves para evitar la intoxicación con monóxido de carbono. Entre ellas señala: “Tener la precaución de revisar todos los elementos, tanto la calefacción a gas como la instalación eléctrica. Un montón de situaciones que en general, y sobre todo en épocas de inconvenientes económicos, las vamos dejando de lado”. Por más que este gas no pueda ser detectado, hay indicios que señalan su presencia en el ambiente, como la coloración amarilla o anaranjada de la llama.
A su vez, el neumonólogo Yusti destaca que es fundamental prevenir y concientizar a la población sobre un uso responsable de la calefacción: “Siempre es importante que haya ventilación, no calefaccionar con las hornallas de la cocina ni con el horno, ni braceros en el interior de las viviendas y ventilar los ambientes”.
En caso de presentarse algún signo de intoxicación es fundamental abrir puertas y ventanas para ventilar, retirar a la víctima del lugar contaminado y llevarla a un lugar para que pueda respirar aire fresco y luego trasladarla al Hospital o Centro de Salud más cercano, por más que haya recuperado el conocimiento. Ante consultas o dudas, el Ministerio de Salud de la Nación recomienda comunicarse con las siguientes líneas telefónicas gratuitas, con atención las 24 horas:
0800 – 333 – 0160 Hospital Posadas – El Palomar, Morón – PBA
0800 – 222 – 9911 Hospital Sor María Ludovica – La Plata – PBA0800 – 444 – TOXI (8694) Hospital de Niños R. Gutiérrez – CABA
