Nuestro derecho, nuestro lugar, nuestro futuro…

Texto:

Estudiante de Comunicación Social (UNM)

Adicción a las redes sociales: la muerte del descanso

El consumo excesivo de "social media" (tal como originalmente se las denominó en inglés), altera el sueño, fomenta el sedentarismo y puede traer aparejados problemas de salud mental. Recuperar las actividades presenciales, una clave.
“No es necesario dejar de consumir las redes, pero es importante dedicarle menor tiempo”, dice el psicólogo Rubén Gonzalez. Fotos: Clara Pérez Colman, de Anccom.

En la actualidad una gran cantidad de personas utilizan las redes sociales como WhatsApp, Instagram, Facebook, X, TikTok, Telegram, entre otras. Estas plataformas digitales se actualizan constantemente cambiando las formas de comunicación. Esta adaptación se logra con el uso constante de las aplicaciones, haciéndolo nocivo. Para algunos las redes sociales son solo un entretenimiento o un medio de comunicación, para otros es un trabajo. Sin distinción de género ni edad, los medios digitales usados en exceso pueden provocar una adicción.

¿Qué es la adicción a las redes sociales?

La adicción a las redes no tiene una definición específica, por lo que podemos tomar diversas definiciones para entender de qué se trata. Rubén González, psicólogo recibido de la Universidad de Buenos Aires, dice que “la adicción en las redes sociales se define como un uso compulsivo y excesivo donde la persona no tiene control sobre usarla o no, sino que se manifiesta como una necesidad constante.” Él afirma que todas las personas pueden volverse adictas a algo que en la cotidianeidad es inofensivo, por ejemplo, una comida, un deporte o incluso el agua, pero que su consumo excesivo puede ser perjudicial.

Lía Bermani, licenciada en Comunicación Social y profesora en escuelas secundarias de Moreno, define la adicción a las redes a partir de la tecnofilia. Ella declara que “cuando hablamos de adicción a las redes sociales estamos hablando de tecnofilia, que es un diagnóstico que se da a partir de esta necesidad permanente de tener un contacto a través de cualquier red social o de estar permanentemente en una computadora, ya sea jugando, chateando, navegando por distintas páginas web, buscando noticias en Facebook, tuiteando o simplemente tiktokeando”.

¿Cuáles son los factores influyentes?

La adicción a las redes sociales puede ser generada por diversos factores.  Mario Claudio Moraiz, trabajador social de la ES N°1 Manuel Belgrano, plantea que “la utilización de las redes activa la liberación de la dopamina en el cerebro, esto genera una sensación de placer y puede llevar a la búsqueda constante de esa sensación, se puede decir que es similar a otras adicciones.”

Otra causa relevante tiene que ver con la búsqueda de aprobación. González explica esto a partir del enfoque cognitivo conductual, con lo que llaman reforzadores positivos, que es cuando una persona hace o dice algo esperando la validación de alguien por considerarlo importante. En las redes esto se ve cuando las personas hacen posteos o suben historias a cambio de likes o comentarios. Esta aceptación a veces puede estar ligada con vivir una realidad distinta a la cotidiana. “Escaparse del aburrimiento también del día a día, de los problemas, de vivir una vida fea con violencia intrafamiliar, puede generar adicciones en una persona porque me estoy escapando de esa realidad, muto a una realidad virtual completamente distinta”, expone, por su parte, González.

Otro factor es el tiempo de uso del celular; en ese sentido”, Bermani cuenta: “Al menos en el ámbito donde me desempeño como profesora, me ponen alerta porque muchos alumnos responden que se van con el celular prendido y los dejan abajo de la almohada.”

¿Quiénes son los más afectados?

Los profesionales coinciden que la adicción a las redes sociales se da mayormente en adolescentes y adultos jóvenes. “Tienen mayor riesgo por su constante exposición al uso de las redes sociales.”, dice Moraiz. Sumado a esto, “todos los jóvenes tienen hoy celular, sería raro ver a un chico que no tenga celular.”, manifiesta González. A su vez, ambos coinciden que las mujeres, en mayor o menor medida que los hombres, son las que más expuestas se encuentran a las redes.

Cecilia Domenella es estudiante y vive en Paso del Rey, suele ser gran consumidora de las plataformas digitales como Twitter, Instagram, WhatsApp, Pinterest, AO3, Wattpad, Tumblr y ocasionalmente Facebook. Ella opina que “puede que las mujeres seamos más afectadas por todos los estereotipos, el compararse con otras y ver que hacen ciertas personas, como influencers, personas públicas o pares, y tal vez te hagan sentir que tenés que actuar o verte como esas personas. Ahí es cuando te empieza a afectar de alguna manera, más que nada en niñas y adolescentes. Y en cuanto a hombres es tal vez un poco lo mismo, pero con la diferencia que no son tan juzgados por no pertenecer”. 

Riesgos causados por el uso excesivo de redes

El uso constante y excesivo de las redes sociales puede provocar diversas afecciones, por ejemplo, riesgos en la salud mental. “Ansiedad, depresión, baja autoestima, trastornos del sueño. Impacta en la autoimagen, la comparación constante con los demás y se suma la pérdida de tiempo, dejando poco espacio para las actividades significativas, relaciones personales y autocuidado.”, asegura Moraiz.

Además, trae aparejados problemas físicos. “Los estudios están señalando que puede haber una perdida en lo que viene a ser lo visual”, expone González.  También impacta en la vida profesional y académica, por una hipervigilancia. “Esta necesidad constante, como cualquier adicto, fatiga visual y problemas posturales sí o sí, porque no es que nosotros miramos el celular con 90 grados.”, menciona el psicólogo.

Sumado a esto, la adicción “se relaciona con el aislamiento, la mala alimentación, el exceso de alimentación, el empezar a pensar en la realidad a través de la pantalla y no vivir la vida real, insomnio.”, expresa Bermani. Domenella, al respecto, reconoce: “No puedo dormir sin antes usar las redes o Internet en general, muchas veces elijo estar mirando Instagram o leyendo tweets antes que dormir directamente cuando te vas a acostar.”

Una forma de combatir la adicción o de prevenirla es estableciendo límites de tiempo con respecto al uso de las redes sociales, usarlas de manera consciente y sin dejar de lado las interacciones cara a cara. Moraiz propone: “Tener en cuenta los horarios, el tiempo de uso, tener en cuenta las interacciones cara a cara y actividades fuera de línea. Buscar actividades alternativas que brinden satisfacción, como deportes o hobbies, utilizar las redes sociales de manera más consciente y equilibrada para evitar sus posibles efectos negativos.” González comenta que “Android, por ejemplo, te pone cuánto tiempo consumiste ciertas aplicaciones. No es necesario dejar de consumir las redes, pero es importante dedicarle menor tiempo.”

Para Bermani es importante educar. “Hablar claramente de lo que significa la adicción a la tecnología y sobre todo a las redes sociales, empezar a generar espacios de concientización, espacios donde se hable de lo importante que es tener la tecnología en nuestras vidas con un buen uso, con un uso útil y lo importante que es tener en nuestras vidas las relaciones o los vínculos cara a cara, y concientizar a partir de lo terrible que es caer en la tecnofilia.”, asevera la comunicadora.

Comparte esta nota 

otros artículos
relacionados

Agencia de Noticias de la Universidad Nacional de Moreno

Av. Bme. Mitre N° 1891, Moreno (B1744OHC), provincia de Buenos Aires.
Edificio Histórico – Ala Oeste P.B. – Interno: 3771
Teléfonos:
0237 460-9300 (líneas rotativas)
011 2078-9170 (líneas rotativas)
Correo electrónico: anunm@unm.edu.ar

UNM_bicentenario_blanco
Ingresar usuario y contraseña
Logout