Las matemáticas no solo son esenciales para tomar decisiones informadas en nuestra vida cotidiana, sino que también representan una herramienta crucial para el desarrollo del pensamiento crítico, la resolución de problemas y la comprensión del mundo. Además, son la base de muchos otros campos científicos y tecnológicos. Profesiones como la ingeniería, la economía, la arquitectura y la biotecnología dependen de la comprensión y el manejo de conceptos matemáticos para su ejercicio. Sin embargo, en Argentina la enseñanza de esta materia enfrenta diversos desafíos que obstaculizan el aprendizaje.
Un indicio clave de las habilidades matemáticas de los estudiantes de primaria se refleja en los resultados de las pruebas nacionales del sistema educativo Aprender 2023. De acuerdo con el informe definitivo dado a conocer en mayo por la Secretaría de Educación de la Nación, se observó en los exámenes de matemáticas el mismo mal desempeño que se ha registrado durante al menos una década. Este estancamiento en el aprendizaje implicó que casi la mitad (48,6%) de los estudiantes no alcanzó un nivel de desempeño esperado como aceptable para finalizar la primaria. El cuestionario incluyó a 614 mil estudiantes de 6° grado en más de 19 mil establecimientos educativos de todas las jurisdicciones del país, tanto de gestión pública como privada.
Con respecto a la escuela secundaria, un indicador importante son las pruebas PISA del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes, coordinado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En la última edición de 2022, que tuvo un enfoque principal puesto en las matemáticas, los exámenes abarcaron a más de 12 mil alumnos de 460 escuelas de todo el país. De acuerdo al Informe de Resultados de Argentina en PISA 2022, nuestro país obtuvo un promedio de 378 puntos en matemáticas, manteniendo el desempeño estable con solo un punto menos en relación a la edición anterior de 2018.
Al realizar una comparación internacional de las PISA, es evidente que Argentina enfrenta serios desafíos en la educación de las matemáticas: “Los datos de la prueba de matemáticas, área sobre la cual se hizo foco en la medición de 2022, muestran que Argentina ha obtenido 378 puntos, casi 100 puntos menos que el promedio de los países de la OCDE”, de acuerdo al informe ¿Cómo le fue a Argentina en PISA 2022? del Observatorio de Argentinos por la Educación.
El mismo informe reveló que nuestro puntaje nos posiciona en el puesto 66 de 81 países participantes, y alcanzando solamente el 8° puesto de la región: “Los datos de 2022 muestran que Argentina queda rezagada con respecto a otros países latinoamericanos. En matemáticas, Argentina (378 puntos) queda por debajo de Chile (412 puntos), Uruguay (409), Costa Rica (385), México (395), Perú (391), Colombia (383) y Brasil (379). Detrás quedaron Guatemala (344), El Salvador (343), Panamá (357), Paraguay (338) y República Dominicana (339)”, explicaron desde Argentinos por la Educación.
Asimismo, uno de los datos más preocupantes de los resultados de las PISA es que 7 de cada 10 alumnos argentinos de 15 años no lograron desarrollar niveles básicos en matemáticas. En otras palabras, el 72,9% de los estudiantes no pudo acceder al nivel 2 de desempeño, el cual es considerado el más elemental. Al mismo tiempo, solo el 27% de nuestros estudiantes alcanzaron o superaron los niveles mínimos de desempeño.
ANUNM conversó con Laura Camiño, profesora de Matemáticas de nivel medio en Moreno, quien en los últimos años ha desempeñado también el rol de Auxiliar Estudiante en el Curso de Orientación y Preparación Universitaria (COPRUN) de la Universidad Nacional de Moreno. Además, Laura es graduada de la Licenciatura en Comunicación Social con Orientación Científica de la misma casa de estudios. Durante la entrevista, compartió sus valiosas perspectivas sobre el complejo panorama de la enseñanza y el aprendizaje de las matemáticas entre adolescentes y jóvenes. Con su experiencia tanto en la secundaria como en el entorno universitario, nos ofreció una visión integral de los desafíos en ambos niveles educativos.
En cuanto a las causas de que el 70% de los estudiantes de 15 años no alcancen los niveles básicos de matemáticas, Camiño consideró que éstas son múltiples y complejas: “Por un lado, la educación primaria no está afianzando algunas cuestiones sobre las operaciones básicas y los alumnos llegan a la escuela secundaria con dificultades para hacer operaciones. También influyen las dificultades para leer e interpretar, ya que muchas veces les das una actividad y lo primero que preguntan es qué hay que hacer, sin leer la consigna ni siquiera mirarla.”
La docente agrega: “Por otro lado, hoy en día los pibes de 15 años tuvieron un año estudiando en pandemia, y entonces el docente tiene la necesidad de explicar cosas que antes se daban por sabidas. Es un ir hacia atrás constantemente, para poder intentar avanzar. Por ejemplo, en 4° año hay que repasar operaciones con números enteros, que se aprende en 2° año”.
Con respecto a las estrategias y métodos que deberían reevaluarse para mejorar la educación de matemáticas en la escuela secundaria, Camiño comenta: “Algo muy importante que habría que revisar es cómo se van combinando los temas entre la primaria y la secundaria, y también año a año durante la secundaria. Hoy en día no tenemos a los mismos estudiantes de hace tan solo cinco años atrás porque ya no tienen el hábito de sentarse a estudiar. Eso te dificulta aprender matemáticas, ya que si no te dedicás a hacer un ejercicio, por más que te sepas la teoría no vas a saber aplicarla”, declaró la docente.
En cuanto al acondicionamiento para realizar la transición desde el nivel medio hacia la universidad, la profesora explica: “Se trata de preparar a los estudiantes para el estudio superior, ese es uno de los objetivos de nuestra escuela secundaria, pero al tener que ir explicando cosas cada vez más básicas, se dejan de lado contenidos que los prepararía mejor para la universidad”.
Por último, Camiño recordó su práctica docente con los ingresantes: “Cuando estuve como ayudante en el Coprun se repasaban algunos temas básicos como operaciones con enteros o la resolución de ecuaciones simples. Pero los tiempos del curso preparativo son para tratar de avanzar en temas propios del Coprun, para prepararlos para su carrera en la universidad, y no para intentar enseñar lo que no pudieron aprender en el secundario”, afirmó.
