
La segunda y última jornada del CEPI reunió ayer, entre otras actividades, a un panel de especialistas de primer nivel bajo el título “Política de tipo de cambio, términos reales de intercambio y empleo en países en desarrollo”, con el motivo de analizar perspectivas críticas y reflexivas sobre los desafíos económicos que enfrenta Argentina como economía emergente. El encuentro contó con la participación de la doctora en Desarrollo Económico y diputada nacional, Julia Strada; el doctor en Economía e investigador del CONICET, Pablor Bortz; y el vicedecano-coordinador de la Licenciatura en Economía de la UNM, Agustín Mario; el encuentro fue moderado por Haroldo Montagú, economista y docente de la UNM.
Bortz inició su intervención analizando cómo se comporta una política cambiaria cuando se encuentra subordinada a distintos factores: “Es sustancialmente necesario acumular reservas a un nivel suficiente, ya que sin reservas no se puede hacer nada; por otro lado flotar el tipo de cambio no las sustituye, sino que agrava el problema”, afirmó. Y concluyó destacando la importancia de un Estado eficaz en la producción de divisas para evitar las situaciones pendulares que condicionan la economía argentina.
Por otro lado, Mario destacó desde una perspectiva productiva cómo debe ser el rol del Estado: “Lo que debe intentar hacer la política pública es maximizar los términos reales de intercambio y ver cuánto jugo podemos sacarle a nuestras exportaciones”. Sobre esta misma línea finalizó planteando su tesis expuesta en su libro Teoría del Dinero Moderno y empleador de última instancia, publicado por UNM Editora, que plantea cómo Argentina puede usar el pleno empleo para controlar la inflación.
La diputada Strada, en tanto, ofreció una perspectiva coyuntural, resaltando cómo las políticas fiscales deben ir de la mano con decisiones políticas firmes que protejan a los sectores más vulnerables. También enfatizó el papel del Estado en la elección de una estrategia cambiaria sostenida en el tiempo: “La historia económica de nuestro país está marcada por una falta de política cambiaria sostenida en el tiempo, los modelos implementados se agotan de manera sistemática y llevan a repentinas crisis y corridas cambiarias”. Ella planteó además que debe haber una política cambiaria robusta que permita contener los efectos negativos sobre la balanza de pagos y la inflación.
Finalmente, Strada resaltó la importancia de realizar estos debates en la UNM: “Traer estos temas a debatir en este lugar, es realmente necesario para poder construir una conciencia crítica sobre el modelo de país que elegimos, y que la universidad siga siendo pública y gratuita es clave para democratizar estos debates”.