
La desnutrición es un problema que suele tener diferentes efectos en la salud. Afecta principalmente a los habitantes de los países con un índice de pobreza elevado. Tanto niños como adultos pueden padecerla, pero, sin embargo mientras más corta sea la edad, las consecuencias pueden ser más graves. Es de público conocimiento que Argentina es uno de los países con problemas de desnutrición. Quienes están en un mayor riesgo de padecer esta patología son las personas de más bajos recursos. Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), un 39,2% de la población esté ubicada por debajo de la línea de pobreza y un 8, 1 % se encuentra en la indigencia. La alta inflación, en tanto, perjudica en especial a los sectores más vulnerables. Y distintos informes en alrededor del 40% el porcentaje de chicos argentinos que sufre de desnutrición.
La nutricionista Belén Sciarrora asegura que “la desnutrición se da cuando hay una carencia en cuanto los nutrientes esenciales, ya sea macronutrientes y micronutrientes como son los minerales”. Esta patología es algo que puede traer consecuencias a quienes la padecen. “En un largo período. Afecta el crecimiento y desarrollo de la persona”, agrega. La problemática trae consecuencias en las salud, incluso desde el nacimiento . “Cuando la madre gesta, si padece de desnutrición, el niño puede nacer con problemas. Es decir, padece específicamente de crecimiento uterino retardado y puede nacer con malformaciones cerebrales sobre todo por deficiencia de ácido fólico y hierro”, asegura, por su parte, el pediatra Julio Alberto Martínez.
Los niños, al encontrarse en plena etapa de desarrollo suelen ser los más afectados por la desnutrición. “No afecta a los niños y adultos por igual, de hecho los niños a veces se ven más afectados”, asegura el doctor Martínez. Los efectos que deja la desnutrición son muchas veces reconocibles a simple vista. “Los síntomas a nivel físico son sobre todo adelgazamiento y pérdida de la grasa corporal y masa muscular así como astenia”, agrega Martínez. Si se reconocen estos síntomas es mejor acudir a un profesional de la salud ya que pueden haber otros problemas que no se ven tan fácilmente.
La patología tiene tanto impacto en la salud que es posible encontrar síntomas de la misma a nivel psicológico. “La desnutrición es una patología que lleva tiempo para reestablecerse y deja secuelas, en algunos casos”, asegura la psicóloga Sandra Ramírez. La problemática se abre camino por diferentes áreas, unas más graves que otras pero todas requieren de un tratamiento. Los síntomas a nivel psicológico que pueden presentar los niños son variados. “Se puede notar atención lábil, es decir, falta de atención en las tareas, pueden estar tristes, cansados, pierden las ganas de jugar, lo cual es la actividad principal en niños”, informa Ramírez. “A veces es necesario un tratamiento interdisciplinario entre pediatría, nutrición y psicología”, agrega.
Para enfrentar el problema de la desnutrición, es necesario que seguir un tratamiento, algo que la nutricionista Sciarrota considera que es más costoso que la prevención. Por su parte, la psicóloga Ramírez asegura que en las clases bajas pueden encontrarse niños y adultos con la patología, pero siempre depende del lugar y el contexto. La situación varía según cada caso.
La pobreza pone en una situación vulnerable a las personas y el acceso a la Canasta Básica Alimentaria puede prevenir un problema de difícil solución. El doctor Martínez asegura que “los tratamientos de la desnutrición son largos y costosos debido a que primero se trata la causa y después se tratan las secuelas que deja la desnutrición”. Como la patología no puede ser ignorada, la nutricionista Sciarrota asegura que siempre es necesario el acompañamiento constante de un profesional, sin importar si se trata de un caso leve o complejo.
Para prevenir la desnutrición, es fundamental llevar una dieta equilibrada y variada que incluya alimentos ricos en nutrientes como frutas, verduras, proteínas, carbohidratos complejos y grasas saludables. La ingesta correcta de alimentos puede ayudar a una mejor absorción de los nutrientes por lo que las posibilidades de padecer esta patología disminuyen notablemente.