
Un 27 de agosto de 1920 la radiofonía argentina daba sus primeros pasos de la mano de Enrique Susini, César Guerrico, Luis Romero Carranza y Miguel Mujica, hoy recordados como los “Locos de la Azotea”. Fueron estos cuatro aficionados quienes transmitieron la ópera Parsifal, de Richard Wagner, desde la terraza del Teatro Coliseo. Se trató de un hito que marcó el punto de partida para la radiodifusión de nuestro país.
Más de un siglo después, la radio mantiene intacta su vigencia y sigue siendo compañía de muchos, ya sea desde un aparato tradicional, una computadora o una aplicación móvil. Ahora tenemos distintas maneras de producir y consumir, de manera sincrónica o a la carta, diversos sonidos. En la actualidad se destacan nuevos formatos como los pódcasts, streamings y los audiolibros. “Hoy hablamos de un medio que sigue basándose en lo sonoro, que es su esencia, pero que circula por diferentes canales de distribución y para un público que va tomando contacto con esos contenidos cuando lo desea”, explica Oscar Bosetti, investigador, docente de la Universidad Nacional de Entre Rios (UNER) y uno de los grandes conocedores de la historia de la radio argentina. Además conduce “Tramas”, programa producido por Radio UNER que se retransmite por 53 emisoras de todo el país.
A la radio le han vaticinado fecha de caducidad tantas veces como años tiene la radiofonía argentina. Sin embargo, y contra todo pronóstico, a lo largo de las décadas este medio se ha ido adaptando rápidamente a las nuevas tecnologías y formas de consumo de contenidos. En cuanto a las particularidades que la siguen manteniendo vigente, Bosetti destaca que principalmente tiene que ver con la oralidad, ya sea en función de una ficción, una información o de una mera compañía.
“Si uno hace una especie de rastreo en torno a la ubicación de las narraciones orales, aún en tiempos de pantallas, los niños continúan siguiendo con atención los cuentos que los adultos le relatan antes de dormir. Ese encanto que tiene la oralidad es lo que le va a asegurar a la radio seguir teniendo vigencia. Siempre va a existir alguien que produzca un contenido sonoro con la palabra articulada y alguien que se sienta movido por este mensaje”, señala Bosetti, quien prefiere hablar de “radios”, en plural, teniendo en cuenta la diversidad de formatos y soportes.
En la misma línea, Agustina Colucci, presidenta de la Asociación de Radiodifusoras Universitarias Nacionales Argentinas (ARUNA), afirma: “Hoy su rol no está discutido. La columna vertebral siempre es la radio, los demás formatos vienen a dar nuevos lugares de divulgación y nuevas oportunidades para mostrar y compartir ese contenido que producimos”. Sin embargo, menciona que en la actualidad estos medios se encuentran pasando por una situación crítica y angustiante, y las radios universitarias no se encuentran exentas de este panorama.
En Argentina son 64 las radios universitarias que integran la red ARUNA (entre las que está Ciudad UNM Radio.88.7) y que abarcan de forma estratégica todo el territorio nacional. Cada una de ellas cumple una función fundamental no solo en su vinculación con los territorios, sino también como espacios de prácticas preprofesionales para las y los futuros comunicadores y periodistas. “Hoy estamos en un momento complicado. En primer lugar porque somos parte de las universidades públicas, por lo tanto estamos sometidos al desfinanciamiento desde 2023 y no hay ninguna política que acompañe o intente fortalecer el rol de los medios públicos a nivel federal. Y, en segundo lugar, por este sistema de hostigamiento constante que hay contra los periodistas, que intentamos ejercer nuestra función con libertad y sin censura”, sostiene Colucci, quien es también la coordinadora de la radio de la Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM).
Las radios como espacio de resistencia
Pese al contexto adverso, tanto las radios universitarias como las comunitarias siguen trabajando en red y buscando siempre la forma de visibilizar las distintas realidades que atraviesan a los territorios. En relación a esto Eva Fontdevila, integrante de la Mesa Nacional del Foro Argentino de Radios Comunitarias (FARCO), afirma: “Los medios comunitarios producen contenido diferente a la comunicación hegemónica y, en muchos casos, con mucho fundamento y calidad disputan audiencias. No convierten a la información en pura mercancía. Aún dentro de estas circunstancias tan hostiles que estamos viviendo, seguimos articulando”.
En cuanto a los desafíos que tienen las radios, Fontdevila, quien también se desempeña como directora de la carrera de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), sostiene: “La producción de contenidos siempre fue y es el desafío más importante de las radios, junto con la generación de espacios de participación e involucramiento de la sociedad. Es un desafío muy grande, por un lado, producir contenido local y, por el otro, tener la capacidad de pensar las temáticas provinciales, nacionales e internacionales”.
Por su parte, en cuanto al futuro de la radio, Bosetti menciona que el gran reto está en “convertir a la propia comunidad en generadora de sentidos, que tendrá al sonido y a la imagen como protagonista de los tiempos que se vienen, y que ya estamos viviendo”. Además, señala la importancia de recordar la función ética que tiene el periodismo, de contrastar y chequear siempre la información, ante la circulación de noticias falsas que se ven en los medios.
Sin duda las radios, y en particular, los medios universitarios, continúan teniendo en su poder la responsabilidad y el desafío de darle voz a una comunidad que tiene mucho que decir, como lo es la de docentes, no docentes, graduados y estudiantes. Tanto Bosetti, como Colucci y Fontdevila, darán, junto al docente de la Universidad Nacional de la Patagonia Christian Britos, la conferencia “¿De qué hablamos cuando hoy hablamos de Radio?”, el jueves 25 de septiembre desde las 15, en el marco del XXVII Congreso de la Red de Carreras de Comunicación Social y Periodismo (REDCOM)-I Jornadas de Comunicación Social de la UNM, que comenzará ese día y se prolongará hasta el sábado 27. Este espacio, abierto a todo el público, será una gran oportunidad para seguir discutiendo el rol social de la radio, sus distintos géneros, formatos y vigencia.